Dije que jamás me subiría a un tanque y definitivamente no lo haré, si mi duración en un juego tan genial y manejable como World of tanks fue de unos pocos minutos. No había jugado jamás en línea, tampoco tenía idea de la existencia de este juego y me decidí a probarlo. Fueron varias primeras veces en una.
Pero vamos con el juego. Para un jugador viejo y atrasado como yo, que se quedó en el Mortal Kombat 2 y Mischief Makers en el N64 (si, aún tengo la consola funcionando) este salto sí que fue grande, al menos en cuanto a las gráficas. Los tanques a ratos me parecieron reales, a no ser por las simulaciones de cortocircuitos que mas parecían estrellitas de año nuevo. Lo demás, impresionante, tomando en cuenta la cantidad de modelos y el récord de jugadores conectados.
Pasé a jugar con un Renault (previamente un entrenamiento con un Sherman) y apenas me conecté con el servidor, se cargaron rápidamente mis compañeros y rivales en una turbulenta batalla grupal. En la primera, no hice mas que ocultarme en un arbusto y los otros tanques de mi grupo acabaron rápidamente con sus rivales. En la segunda, apenas moví el aparato me llegó un tiro que me dejó fuera de combate. En la tercera logré apañar un compañero con un par de tiros hasta que me volaron y en la última, parece que eran todos novatos, ya que estaban escondidos en los arbustos y cuando llegó el primer tiro contrario, salieron todos arracando y fueron eliminados. Me vi solo disparando tiros malos hasta que llegó una lluvia de disparos que acabó con mi incursión en el juego.
El juego es frenético. Hay jugadores expertos que de seguro usan palancas de juego, porque los tanques se movían como si fueran controlados por la computadora en algunos casos. De todas formas, es una experiencia que recomiendo totalmente, eso sí, hay que tener una buena conexión y bajar unos 5gb a la PC para disfrutarlo por completo, pero vale la pena, si te gustan los tanques o al menos darle de cañonazos a tus amigos o desconocidos.
Trailer: